El espejo
La imagen que reflejaba el espejo no era lo que en realidad se veia,complicado de explicar pero asi ocurria, aquella mañana en que el viento soplaba con fuerza, llevando y trayendo todo lo que no ponia resistencia a su paso,dentro del espejo,como una ventana,otra dimension, un mundo diferente,yo de este lado, mas observaba, mas cambiaba todo,esforzaba mi mente para comprender,sin lograrlo, no entendia, luces ,colores,sombras,paisajes,sonidos que atraviezan los elementos,distorsionan, amplifican, perforan y los transforman
Un liquido rojo,transparente se derrama desde un cilindro abierto en su base,sin producir ese efecto que los liquidos hacen cuando son derramados, llegaba al punto de tocar otra superficie transformandose en algo solido, covirtiendose en otros elementos, una especie de metamorfosis, el color y la textura cambiaban completamente
Una de esas formas me resulto muy particular, la mutacion de los colores desde rojos hacia verdes con tanto brillo como piedras preciosas, la forma era incierta como cuando una gota explota pero sin desunirse,queria encontrale sentido a lo que veia y cambiaba nuevamente, asi ocurrio por varios segundos.
Un sonido agudo y prolongado desvio mi atencion hacia otro punto en el espejo,un orifico una especie de abertura como el ojo de una cerradura que se agrandaba en la medida que mas atencion le prestaba y ocupar asi la totalidad del espejo, desde ahi un mar azul intenso que se degradaba en tonos turquesas al ritmo de sus olas calmas que llegaban hasta el borde mismo,en su horizonte comienza a dibujarse en forma de aparicion un bote,emerge cual fantasma navegando ese mar que lo transporta, la masa de agua se alisa, mostrando nitido al bote, avanza , el ruido de los remos que se hunden en el agua se repite como un eco
El hombre que rema, del cual solo veo su espalda cubierta en un abrigo negro se inclina y vuelve a erguirse en movimientos casi sincronicos haciendo asi deslizar la embarcacion, a la aproximarse a mi levanta los remos,busca una soga dentro del bote que toma en sus curtidas manos y volviendose a mi la arroja, me sorprende y doy pasos hacia atras me alejo; el mar desaparece,solo la imagen de este hombre ahora llena todo el espejo, su rostro denota cansancio quizas hartazgo seria la palabra , es como si estuviera encerrado en alguna celda invisible , resignado a su suerte,cubierto de una melancolia y nostalgia de algo por vivir o no vivido, sus cabellos desordenados caen prolijamente sobre su frente , su piel casi morena ,su barba de varios dias sus labios anchos, secos, que humedece con su lengua, con su mano acaricia sus cabellos haciendo de sus dedos una especie de peine dando forma a un peinado,acomoda su ropa, abotona el cuello de su camisa lentamente sintiendo como aprieta afloja pasando sus dedos entre el cuello de la camisa y el suyo, enlaza su corbata en un nudo miles de veces repetido, alisa la tela a la altura de los hombros , ensaya una sonrisa que se desdibuja inmediatamente ,toma su rostro entre sus manos bajandolas despacio estirando su piel mientras pone una colonia barata que parece despertarlo extiende su mano hacia un interruptor, todo se oscurece en el espejo abro la puerta el viento sopla con menos intensidad, acomodo mi abrigo y vuelvo ajustar la corbata al cuello de mi camisa y emprendo el camino tantas veces recorrido hacia mi trabajo.
Sergio Cammarata
La imagen que reflejaba el espejo no era lo que en realidad se veia,complicado de explicar pero asi ocurria, aquella mañana en que el viento soplaba con fuerza, llevando y trayendo todo lo que no ponia resistencia a su paso,dentro del espejo,como una ventana,otra dimension, un mundo diferente,yo de este lado, mas observaba, mas cambiaba todo,esforzaba mi mente para comprender,sin lograrlo, no entendia, luces ,colores,sombras,paisajes,sonidos que atraviezan los elementos,distorsionan, amplifican, perforan y los transforman
Un liquido rojo,transparente se derrama desde un cilindro abierto en su base,sin producir ese efecto que los liquidos hacen cuando son derramados, llegaba al punto de tocar otra superficie transformandose en algo solido, covirtiendose en otros elementos, una especie de metamorfosis, el color y la textura cambiaban completamente
Una de esas formas me resulto muy particular, la mutacion de los colores desde rojos hacia verdes con tanto brillo como piedras preciosas, la forma era incierta como cuando una gota explota pero sin desunirse,queria encontrale sentido a lo que veia y cambiaba nuevamente, asi ocurrio por varios segundos.
Un sonido agudo y prolongado desvio mi atencion hacia otro punto en el espejo,un orifico una especie de abertura como el ojo de una cerradura que se agrandaba en la medida que mas atencion le prestaba y ocupar asi la totalidad del espejo, desde ahi un mar azul intenso que se degradaba en tonos turquesas al ritmo de sus olas calmas que llegaban hasta el borde mismo,en su horizonte comienza a dibujarse en forma de aparicion un bote,emerge cual fantasma navegando ese mar que lo transporta, la masa de agua se alisa, mostrando nitido al bote, avanza , el ruido de los remos que se hunden en el agua se repite como un eco
El hombre que rema, del cual solo veo su espalda cubierta en un abrigo negro se inclina y vuelve a erguirse en movimientos casi sincronicos haciendo asi deslizar la embarcacion, a la aproximarse a mi levanta los remos,busca una soga dentro del bote que toma en sus curtidas manos y volviendose a mi la arroja, me sorprende y doy pasos hacia atras me alejo; el mar desaparece,solo la imagen de este hombre ahora llena todo el espejo, su rostro denota cansancio quizas hartazgo seria la palabra , es como si estuviera encerrado en alguna celda invisible , resignado a su suerte,cubierto de una melancolia y nostalgia de algo por vivir o no vivido, sus cabellos desordenados caen prolijamente sobre su frente , su piel casi morena ,su barba de varios dias sus labios anchos, secos, que humedece con su lengua, con su mano acaricia sus cabellos haciendo de sus dedos una especie de peine dando forma a un peinado,acomoda su ropa, abotona el cuello de su camisa lentamente sintiendo como aprieta afloja pasando sus dedos entre el cuello de la camisa y el suyo, enlaza su corbata en un nudo miles de veces repetido, alisa la tela a la altura de los hombros , ensaya una sonrisa que se desdibuja inmediatamente ,toma su rostro entre sus manos bajandolas despacio estirando su piel mientras pone una colonia barata que parece despertarlo extiende su mano hacia un interruptor, todo se oscurece en el espejo abro la puerta el viento sopla con menos intensidad, acomodo mi abrigo y vuelvo ajustar la corbata al cuello de mi camisa y emprendo el camino tantas veces recorrido hacia mi trabajo.
Sergio Cammarata
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